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miércoles, 26 de marzo de 2025

DOCTORADO Y MAESTRIA DE CORONEL FAP MANFRED WILMAR RONDÓN LLAZA NO ENCAJAN EN FECHAS - FUERON COMPRADOS PARA SU ASCENSO A MAYOR GENERAL

Escándalo en la FAP: Coronel Rondón - CULITO DE ORO y su polémico ascenso a Mayor General en 2025

El Coronel Rondón, actual agregado en los Estados Unidos, ha causado revuelo dentro de la Fuerza Aérea del Perú (FAP) al manifestar abiertamente a sus colegas que su ascenso a Mayor General en 2025 ya está asegurado. Pero lo que realmente ha encendido las alarmas son las razones detrás de esta aparente certeza.

Según fuentes internas, Rondón se ha convertido en un hombre de extrema confianza para el Comandante General de la FAP, utilizando recursos públicos para protegerlo y mantener operativa su red de influencias.

Maestría y doctorado “comprados”

Uno de los aspectos más controvertidos de su carrera es la supuesta adquisición fraudulenta de títulos académicos. Se alega que Rondón habría comprado su maestría y doctorado a través de una intermediaria identificada como Jessica Tapia, garantizando así un perfil académico que le abriría el camino para alcanzar el grado de General.

La “caja chica” del Comandante General

Durante su periodo como agregado en los EE.UU., Rondón habría asegurado una fuente de financiamiento irregular para el alto mando. Se le acusa de ingresar al Perú con dinero en efectivo en más de 50 ocasiones, evadiendo los controles y utilizando estos fondos para cubrir gastos personales y comisiones ordenadas por el Comandante General.

Lo más grave es que estos viajes habrían sido pagados con presupuesto del Estado, desviando fondos destinados a la institución para favorecer a un reducido grupo de oficiales privilegiados.


Irregularidades en los estudios de posgrado del Coronel Rondon Llaza

Al analizar la información de la imagen, se observan graves inconsistencias en las fechas de matrícula, egreso y emisión de los diplomas del Coronel Manfred Wilmar Rondón Llaza. Estas irregularidades podrían constituir faltas administrativas e incluso delitos relacionados con falsificación de documentos y fraude académico.

1. Maestría obtenida en un tiempo imposible (2013) en una universidad no licenciada

  • Según la imagen, Rondón Llaza se matriculó en la maestría en Administración y Dirección de Empresas el 05/08/2013 y egresó el 05/12/2013, es decir, en apenas cuatro meses.

  • Es imposible completar un programa de maestría en tan poco tiempo, dado que la normativa exige un tiempo mínimo de estudios y créditos académicos equivalentes a dos años.

  • Además, esta maestría fue obtenida en la Universidad Alas Peruanas (UAP), una institución que no fue licenciada por SUNEDU debido a serias deficiencias académicas y administrativas.

2. Su título de licenciatura no estaba registrado cuando ingresó al doctorado

  • El diploma de licenciado en Ciencias de la Administración Aeroespacial fue emitido el 20/05/2015.

  • Sin embargo, Rondón Llaza se matriculó en el doctorado en la Universidad Nacional de Educación Enrique Guzmán y Valle en marzo del 2017.

  • La normativa exige que para matricularse en un doctorado, el título de grado debe estar inscrito en SUNEDU, lo que parece no haber sucedido aún en el momento de su matrícula.

3. Retraso en la entrega del diploma de maestría

  • El diploma de la maestría fue emitido recién el 21/04/2017, lo que significa que en marzo de 2017 aún no tenía el título oficialmente registrado.

  • Esto contradice la exigencia legal de que para inscribirse en un doctorado se debe contar con el grado de maestro debidamente registrado en SUNEDU.

Posibles delitos e irregularidades

Las inconsistencias detectadas sugieren una serie de irregularidades que pueden constituir faltas graves y posibles delitos académicos como:

Falsedad ideológica: Registro de información falsa en documentos académicos.
Fraude académico: Obtención de títulos sin cumplir los requisitos exigidos por la ley.
Uso indebido de documentos públicos: Presentación de diplomas con fechas contradictorias para acceder a cargos públicos o beneficios.

Este caso debería ser investigado por las autoridades competentes, como SUNEDU, la Contraloría General de la República y el Ministerio Público, ya que existen indicios claros de corrupción académica que podrían haber facilitado su ascenso dentro de la institución.


El perfil “ideal” para ser General

A pesar de los cuestionamientos, Rondón parece cumplir con el “perfil perfecto” para el ascenso, no por méritos profesionales, sino por su lealtad absoluta y capacidad para manejar fondos del Estado en beneficio del alto mando. Su ascenso a Mayor General en 2025 parece ser solo cuestión de tiempo, lo que ha generado malestar entre oficiales de carrera que ven frustradas sus aspiraciones por falta de contactos e influencias.

Las graves denuncias sobre Rondón y su rol en la red de favores dentro de la FAP exigen una respuesta inmediata de las autoridades. Se espera que la Contraloría General de la República investigue las supuestas irregularidades en su formación académica, sus viajes frecuentes al Perú con dinero en efectivo y el desvío de fondos estatales.

Sin embargo, dentro de la institución muchos temen que, como en otros casos, la corrupción prevalezca sobre la transparencia y la meritocracia.

La comunidad aeronáutica y la opinión pública observan con atención. El futuro de la FAP depende de que estos hechos sean debidamente investigados y sancionados


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domingo, 9 de marzo de 2025

ABUSO Y ORDENES SERVILES FAP- UTILIZAN A PERSONAL DE SUBOFICIALES FAP COMO SERVIDUMBRE EN CLUB FAP

Denuncia: Enfermeros Militares de la FAP son Víctimas de Abuso y Maltrato Laboral

Una grave denuncia sacude las filas de la Fuerza Aérea del Perú (FAP), donde suboficiales especialistas en enfermería han sido desplazados de sus unidades médicas sin justificación alguna para ser enviados a la Escuela de Supervivencia en el Mar (ESMAR). Lejos de cumplir funciones relacionadas con su especialidad, estos militares están siendo utilizados como personal de limpieza, mozos y hasta sirvientes de los familiares de oficiales de alto rango.

Un traslado irregular y sin justificación

El personal de suboficiales enfermeros, altamente capacitados para atender a pacientes en instalaciones médicas como el Hospital Central FAP, la Dirección de Sanidad y el Hospital Las Palmas, ha sido retirado abruptamente de estos lugares estratégicos para ser enviados a la unidad ESMAR. Sin embargo, esta unidad no requiere una cantidad considerable de personal médico, lo que pone en evidencia un oscuro propósito detrás de esta decisión.

Los testimonios recogidos indican que este traslado responde a la necesidad de cubrir tareas serviles en beneficio de los familiares de oficiales, quienes utilizan a estos suboficiales como personal doméstico, obligándolos a cumplir funciones ajenas a su preparación y rango militar.

Trabajo forzado y condiciones inhumanas

Los suboficiales denuncian que sus horarios laborales han sido extendidos de manera abusiva, trabajando de lunes a domingo desde las 08:00 a.m. hasta las 06:00 p.m., sin descanso y en condiciones de explotación laboral. Además, se les niegan beneficios básicos como pasajes o una estadía digna, a pesar de que la unidad ESMAR se encuentra en una zona alejada de la capital.

A esto se suma que, en ESMAR no existe un puesto de servicio de sanidad, lo que confirma que su traslado no responde a una necesidad médica, sino a una maniobra del alto mando para utilizarlos como empleados domésticos.


Servidumbre disfrazada de servicio medico militar

La denuncia detalla que estos suboficiales son obligados a atender requerimientos personales de los familiares de oficiales de alto rango, quienes asisten al Club FAP con un séquito de esposas, hijos e incluso parejas de sus hijos. Según las víctimas, se les exige atender a estas personas como si fueran personal de servicio de un hotel, en lugar de desempeñar sus funciones médicas dentro de la institución.

Este abuso de poder no es un hecho aislado, sino una práctica sistemática dentro de la FAP, donde el alto mando actúa con total impunidad, utilizando recursos humanos capacitados en enfermería para satisfacer necesidades personales de sus familias.

Acciones legales en camino

Ante esta grave violación de los derechos laborales y humanos de los suboficiales, se estaría preparando una denuncia penal contra los oficiales responsables de estos abusos. La comunidad militar exige una respuesta inmediata y sanciones ejemplares para quienes han convertido una institución de honor y servicio en un feudo de explotación y servidumbre.

Esta denuncia pone nuevamente en el ojo del huracán a figuras del alto mando, cuyo accionar autoritario y abusivo ha sido señalado en reiteradas ocasiones. En los próximos días, se revelarán nuevos detalles sobre los responsables de esta injusticia, incluyendo una investigación sobre el "General Cateto" y su círculo cercano.

La FAP es una institución de servicio a la nación, no un feudo donde el alto mando y sus familias pueden disponer del personal a su antojo. Es momento de que la justicia militar y civil actúe con firmeza para frenar estos atropellos.